Meditación de precalentamiento para memorizar.

Cuando utilices técnicas de memorización, necesitas aminorar, las ondas cerebrales el ritmo de ondas cerebrales a un estado de plena concentración. Practícalo realizando el siguiente ejercicio de meditación:

• Elige una habitación silenciosa para meditar, donde nadie te moleste. Coloca un almohadón para apoyar el cuello y tiéndete boca arriba. Mantén  los brazos relajados al lado del cuerpo, con las palmas hacia arriba. Deja caer los pies hacia afuera, de manera natural.
• Cierra los ojos. Inspira lentamente y profundamente por la nariz. El diafragma debe ensancharse levantando primero el estómago y después el pecho. Expira lentamente por la boca. Sigue respirando durante toda la sesión de meditación.
• centra la atención en un espacio imaginario, justo detrás de tus ojos. Imagina que en este punto flota una luz pequeña y brillante. Dirige toda tu atención hacia esa luz.
• Imagina que la luz blanca crece y disminuye al aspirar y expirar. Mentalmente imagina que se vuelve más brillante al inspirar, y más tenue al expirar. Concéntrate en ella tanto tiempo como te resulte cómodo. Intenta practicar este tipo de meditación al menos una vez al día, para fortalecer tu poder de concentración.